El acero inoxidable es uno de los metales más utilizados en la actualidad, ya que cuenta con innumerables ventajas, además es muy asequible y fácil de trabajar. Se trata de un material muy resistente a la corrosión por lo que es difícil que se oxide o deteriore. El acero inoxidable tiene una vida útil realmente larga y apenas requiere de grandes inversiones ni de mantenimiento.  Además, existen diversos tipos, ¿quieres saberlo todo sobre ellos?

Diferentes tipos de acero inoxidable

Dependiendo de su composición se puede hablar de hasta 4 tipos diferentes de acero inoxidable:

  • Acero inoxidable martensítico: este tipo de acero inoxidable está compuesto por un porcentaje de cromo y otro de carbono. Se trata de un material con una resistencia moderada a la corrosión, esto hace que tenga una alta resistencia mecánica. También es magnético. Por el lado contrario, se trata de un acero de muy poca soldabilidad. Este se usa mucho para la realización de tornillos, tuercas o cubiertos.
  • Acero inoxidable ferrítico: el cromo es su principal componente, se caracteriza por su buena resistencia a la corrosión y que se endurecen por trabajo en frío. Además, es magnético. Como aspectos negativos, hay que destacar que es de pobre en dureza y soldabilidad. Este tipo de acero de utiliza para la realización de adornos para muebles y decoración de interiores.
  • Acero inoxidable austenítico: en este tipo el cromo también destaca en su composición, aunque su porcentaje varía mucho y viene ligado junto con un porcentaje menor de carbono. Este no es térmico no magnético y se utiliza en la realización de turbinas de gas, intercambiadores de calor o calentadores de aire.
  • Acero inoxidable dúplex: su composición varía entre un 18% y un 26% de cromo y un 4,5% y un 6,5% de níquel, además de otros elementos como el nitrógeno, molibdeno o cobre. Tiene una mejor soldabilidad. De igual manera, son magnéticos, pero no se pueden endurecer por tratamiento térmico.

Ahora que ya conoces los distintos tipos de acero inoxidable y sus usos aprovéchalo y sácales el máximo partido a tus estructuras metálicas.